BODA NACHO Y ANABEL

La filosofía de Nacho y Anabel es bailar un buen temazo, tomar una buena cerveza fría, y ponerse los vaqueros rumbo a cualquier festival. Se autodenominan disfrutones. Así debía de ser su boda. Y así fue. Cuando nos contaron que se casaban y quería que fuéramos parte de todo, nos emocionamos. Contar en forma de video el día de una pareja tan especial es un placer. Ella llevaba un vestido sorprendente, más de princesa que su propio estilo, pero que le encajaba a la perfección. Él, más nervioso que nunca, lucia una sonrisa que no se quitó en ningún momento. No nos extraña que conquistaran a todo el mundo, como ya lo hicieron con nosotros. La música, la decoración con discos de vinilo, y las letras con luces que rezaban Love Fest acompañaron al humo de colores con el que realizaron su entrada al convite en El Huerto de San Rafael.